Con respecto a 'Los Ángeles' y su polémica.

Yo soy un payo de la Andalucía más profunda que defiende como única patria la cultura, y en esto me amparo, no soy experto en flamenco ni mucho menos. Pero la única patria que tengo es mi cultura y mi idioma, que a la vez me abre las puertas de todas las culturas y me hace una persona plural. Por esta sencilla razón me atrevo a escribir esto, un texto íntimo de reflexión que pretende aclarar mis ideas y que surge después de mucho hablar con mi amigo Iván sobre todo y con otra gente sobre menos, de la polémica causada por el disco ‘Los Ángeles’ de Rosalía.

A Rosalía se la acusa de apropiarse de las letras de su disco, de sus cantes. Esto es un disparate, cómo va a esconder ella de dónde los ha sacado. Sería suicida por su parte porque basta con googlear una letra para que te salga hasta el número de la seguridad social de su autor.
Se le acusa de que esconde que no tiene raíces flamencas, otra acusación sin fundamento. Yo la he escuchado  decir en entrevistas que en su casa no se ha escuchado nunca flamenco y que lo empezó a escuchar ya de mayor en los botellones en los coches de sus amigos. Y que aprendió a cantar con un maestro que la metió más profundo en el cante porque ella primero escuchaba solo a Camarón.
Se le acusa de impostar el acento andaluz a la hora de cantar y sin embargo ser ‘una pija catalana’. Oiga, mire usted, a mí esa canija me canta un tanguillo con el acento catalán de ella  y se lo compra su prima, porque yo no me lo creo. Entre otras cosas porque una letra en andaluz, tú me dirás cómo entra en la música si la castellanizas. Lo que sería falso de verdad es que intentara robarles sus acentos y sus palabras andaluzas, sería mutilar las canciones.
La estética ‘agitaná’ que usa, esto también mal. ¿Resulta que el pelo largo, los aros grandes, los oros y las uñas son patrimonio exclusivo gitano? Mi sobrina, mi cuñada, mi madre en su juventud, mis vecinas, usan estos elementos estéticos y son payas, es un hecho. Es verdad que son andaluzas, pero esto es otro punto a tratar más adelante.

Rosalía es una ladrona blanca y con dineros de la cultura de un pueblo que ha escrito sus letras con la sangre de su sufrimiento y marginación. Eso he leído. Además he leído que ella usa ese dolor y sufrimiento ajeno para obtener gloria dándole la espalda al pueblo que sufrió (y sufre). Apropiación cultural. ¿Cómo se puede uno apropiar de un arte plural? Un arte que es la mezcla de ritmos negros, blancos, gitanos, moros, centroeuropeos, indios y americanos. Esto de la apropiación cultural es la idea más conservadora que existe en el arte, porque el arte se construye sumando y sin esa suma, no hay arte. Las nuevas músicas son siempre fusión de otras músicas anteriores, las lenguas son evolución y fusión de otras viejas, la pintura lo mismo. Si Picasso y sus coetáneos no se hubieran ‘apropiado’ del arte africano, ¿qué carajo hubieran pintado, cómo hubieran podido avanzar e innovar? ¿Se nos olvida también que el flamenco debe muchísimo de su estética actual y sus formas, incluso alguno de sus quejíos y sus palmas y su todo, a que en el siglo 19 nacieron los tablaos flamencos en las ciudades andaluzas y en Madrid como atracción para los turistas ingleses que venían atraídos por lo indómito y romántico de estas tierras?
¿Racismo? Rosalía es racista por cantar flamenco y adoptar estética gitana, pero Miguel de Molina, Lorca, Paco de Lucía, Rocío Jurado o Enrique Morente no lo eran. ¿Eso por qué? Pregunto yo. ¿Porque resulta que ellos ya son sagrados, están muertos y son mártires del arte? Cuando Morente grabó ‘Omega’, le cayeron hostias como panes, aunque ahora sea dignamente reconocida como obra maestra del flamenco, no se le olvide a nadie. 
No sería la primera vez que yo escucho hablar de lo cerrado, rancio y racista que es el mundo del flamenco donde ser payo es un impedimento para ser reconocido. Estamos hablando de esta chiquilla que se ha aprovechado de ser blanca para triunfar a costa de los gitanos desde su posición de superioridad, pero son muchísimos más los gitanos grandes dentro del flamenco que los payos, estamos mirando el grano de arena en la playa.

Rosalía es catalana y se apropia del andalucismo en el acento, en la estética, en los cantes, etc. Yo creía que esto estaba ya superado, como andaluz con un poquito de consciencia histórica lo digo, oiga. Porque esto pasa desde la República si no antes y tuvo su máximo apogeo con el régimen franquista que convirtió a España en ‘Flamencolandia’ y olé y convirtió el folclore andaluz en la seña de identidad de la España ‘Una, grande y libre’, ya que nunca existió tal folclore español porque no existió nunca tal España ‘Una, grande y libre’ y algo habría que poner de cara al público.

Lo suyo es un disco muy bien diseñado como producto de márqueting. ¿Esto también es un problema? ¿Llegar a toda una generación que no había escuchado nunca flamenco antes abriendo así un camino, también es malo? Es que se acuesta con C. Tangana. Una niña culta, que tiene talento y ha aprendido a cantar, coge unas canciones preciosas, les da lustre, las graba, encuentra cómo venderlas y tiene éxito. Pero no es que se le de bien, es que se acuesta con C. Tangana y ha prostituido el flamenco haciéndolo llegar a un público inculto en la materia. Hay muchxs gitanxs coetánexs de ella con unos cantes maravillosos que no tienen su éxito y eso es racista. Pues lo mismo tendríamos que analizarlo caso por caso, porque el racismo contra el pueblo gitano es una cosa innegable, y también es innegable que grandes artistas de la historia no han salido de su casa por racismo y por otros motivos de marginalidad, pero esto hoy día pasa poco ya. El que no sale de su casa será que no quiere o no sabe venderse, porque estando en el siglo 21 y con esa maravillosa herramienta que se llama internet, muy mal lo tienes que hacer para conseguir dar con la tecla y tener un producto genial y no salir de tu casa. Si consigues hacer Arte, si consigues hacer algo que tenga eso que nadie sabe lo que es pero es lo único que importa, los mueves un poco y por algún lado revienta. Lo que pasa es que a parte del racismo (que yo no lo niego, pero analicemos cada caso), tienes que dar en la tecla y dar en la tecla es una cosa que nadie sabe cómo se hace y no hay fórmula para hacerlo. Porque el arte es trabajo, trabajo, trabajo y trabajo y una cosa invisible que si no tienes, estás jodido y luego más trabajo. Y además de eso, tienes que saber venderte, hacer relaciones y demás factores que (oh, destino), Rosalía ha sabido buscar, porque la suerte no se encuentra, se busca.
Lo que pasa es que en este país el artista que triunfa siempre es un grandísimo hijo de puta porque somos un país de miserables que no tenemos envidia, como decía don Fernando Fernán Gómez, sino desprecio por el triunfo y el trabajo y el esfuerzo de los demás. Y en lugar de alegrarse uno por el triunfo de Rosalía de las cosas que ha conseguido para ella y para el mundo del arte y para dar a conocer la cultura andaluza a base de esfuerzo, de estudiar y de trabajo duro, (y de tener duende) uno la tacha de racista y de acostarse con C. Tangana (que valientes ganas hay que tener por cierto) porque otros que no son blancos como ella no han podido o no han sabido buscarse la suerte como ella sí.


El racismo existe, no digo yo que no, pero a lo mejor sería menester echarle la culpa al sistema y no a la pobre chavala que ha sabido hacer las cosas bien.